Artaria Quartet

Sei cuartetti per due violini, alto e violoncello dedicati alli Signori Diletanti di Madrid
Edición Vénier (Francia, 1771) – Primera Grabación Mundial

ARTARIA QUARTET
violines y viola: Anthony Martin, Catherine Kyme, Elizabeth Blumenstock
violoncello Elisabeth Le Guin

Grabación:

San Francisco, California (Estados Unidos), 1995


Boccherini y los primeros cuartetos de cuerda

“Los primeros cuartetos auténticos compuestos en Viena […] con independencia total del estilo de Haydn”. Con estas palabras describió el musicólogo H.C. Robbins Landon los cuartetos op. 2 de Luigi Boccherini (1743-1805). Esta obra, compuesta durante su etapa vienesa de juventud, fue su primera aportación a este género entonces emergente del que acabaría legando cerca de un centenar de ejemplos a lo largo de su dilatada carrera. La fecha tan temprana del op. 2 (1761) ha llevado a muchos musicólogos a reivindicar a Boccherini —y no a Haydn— como el “creador” del cuarteto de cuerda, en la medida cuestionable en que pudiera atribuirse a un solo compositor semejante autoría. Una afirmación análoga a la de Landon podría aplicarse en relación con Madrid con los siguientes cuartetos del italiano, los op. 8 (1769) y op. 9 (1770) al ser, posiblemente, los primeros escritos en la villa y corte que puedan recibir con propiedad tal nombre. Se encuentran entre el grupo de composiciones de un Boccherini recién llegado a España, cuando quizá ni siquiera sospechaba que su estancia inicialmente breve acabaría prolongándose hasta el final de sus días.

El Opus 9 es la primera exploración verdaderamente significativa de la interioridad expresiva que Boccherini desarrollaría a lo largo de toda su carrera. Esto supone un retrato interesante de a quien dedicó la obra: sugiere que a “I Signori Dilettanti di Madrid”, que les importaba tanto la sutilidad y el sentimiento tierno como la emoción, o efectos marcados. También es un apunte interesante sobre el compositor, pues Boccherini no podía haber esperado ningún encargo ni trabajo de sus destinatarios; además es posible que ya tuviera la confirmación de su puesto con el Infante. Así la dedicatoria parece ser puramente retrospectiva: nada menos que un testimonio afectuoso y admirado hacia un público específico.

El Cuarteto Artaria se formó en la Bahía de San Francisco en 1985 con el fin de interpretar cuartetos de cuerda clásicos a partir de la experiencia de sus miembros como pioneros del movimiento de música antigua. En la pasada década se convirtieron en uno de los conjuntos musicales más importantes de Estados Unidos que utilizan las cuerdas de tripas y los arcos más ligeros característicos del siglo XVIII y principios del XIX